miércoles, 3 de junio de 2009

Yo pago tu coche ¿tu pagas mi bici?

Me voy a hacer eco de un correo electrónico que me acaba de llegar y me ha gustado su razonamiento. No sé si es una campaña o qué, pero está la mar de bien. Viene a relación de las ayudas estatales que se están dando a particulares para comprar automóviles con objeto de intentar frenar la irrefrenable caída de ventas del sector automovilístico, que indudablemente necesita de una reestructuración en su mercado y en sus estructuras, no de ayudas estatales. Esas ayudas se estan pagando con fondos del Estado, es decir, con el dinero de todos. Sin embargo no hay ayudas para la compra de bicicletas, y ni siquiera se dignan a bajar el IVA de las bicicletas, como por ejemplo hicieron con el de las motos.

¿Es lógico mantener artificialmente a un sector industrial que es deficitario y promotor de múltiples problemáticas en todo el mundo?

¿No es más lógico invertir nuestro dinero en potenciar un transporte público DE VERDAD, para conectar todos nuestros pueblos y ciudades? ¡Hay vida más allá del AVE!... existen las cercanías, los tranvías, los autobuses eficientes, los trenes ligeros, las bicicletas, los pies...

¿Hasta cuando vamos a seguir ofreciendo sacrificios y gigantes ofrendas a la maldita religión del automóvil?

Asómate a la ventana y solo veras coches, coches y coches. Estamos sacrificando el aire que respiramos y un montón de espacio que podríamos utilizar para jugar, pasear, respirar, ompartir, andar, correr, enseñar, aprender, vivir....

Millones de personas en el mundo (la mayoría) no tenemos coche o lo utilizamos de una manera racional, sin embargo estamos pagando las consecuencias de una extendida minoría. Ya está bien.

Por eso decimos:

YO PAGO TU COCHE

¿TÚ PAGAS MI BICI?

Hacienda somos todos
¿verdad?

1 comentario:

Juan Carlos dijo...

estoy totalmente deacuerdo ,sacrificamos el aire que respiramos ,